Lic. Ariel Rozen
La música es un lenguaje artístico de expresión, de comunicación; la música nos posibilita aprender, descubrir y disfrutar.
Cualquier actividad que intentemos programar para niños tiene que tener en cuenta una participación placentera y que los ayude a desarrollar la apreciación estética y la producción creativa. Al preparar una actividad para niños el tiempo y el espacio son factores fundamentales. Para incorporar nuevos contenidos necesitamos tiempo: repetir, reinterpretar, volver a escuchar, rehacer. Esto puede ser enormemente disfrutado por los niños y niñas pequeños.
En todo momento debemos considerar los aspectos auditivos, vocales y rítmicos que caracterizan a cada una de las edades. En cuanto a la audición, a través de distintos juegos los niños aprenden a reconocer sonidos, timbres, voces e instrumentos; conocen nociones de velocidad, intensidad y alturas.
En cuanto a la voz, la canción ocupa un lugar muy importante. A la hora de seleccionar el cancionero se debe tener en cuenta que el lenguaje, el ritmo y la melodía sean acordes a las edades de los niños, por ejemplo para niños de 3-4 años, el rango melódico irá de un do a un sol.
Por último, en cuanto al ritmo, para incorporar nociones rítmicas podemos utilizar nuestro cuerpo y también los instrumentos de percusión. Con el cuerpo, por ejemplo, podemos marcar el pulso y el acento de una melodía.
Desde los primeros años es interesante que los niños y niñas comienzan a explorar, manipular instrumentos de percusión: panderos, panderetas, claves, maracas, triángulos, metalófonos, platillos, etc.
Se trata de permitirles descubrir y no imponer una forma “correcta” de tocar, porque los instrumentos musicales estimulan las habilidades cognitivas y sociales, las habilidades cerebrales, les permite agudizar el oído, y mejorar la motricidad fina y gruesa.
Para niños y niñas más grandes, la guitarra, la batería, la flauta y el piano son instrumentos muy apropiados para introducirlos en el infinito mundo de la música. Recordemos que una actividad musical bien planificada siempre dará su frutos.
